¿Está respondiendo el sector seguro a las nuevas demandas del colectivo sénior?, ¿interpretan bien las aseguradoras las preocupaciones del grupo de edad de 55 a 64 años?, ¿qué objeciones ponen los séniors a la contratación de un seguro de salud? A estas y otras preguntas clave trata de dar respuesta el informe promovido por Fundación Mutualidad para conciliar las expectativas y demandas de los asegurados más veteranos con la oferta de aseguramiento.
Gap de protección entre la oferta y demanda aseguradora para el colectivo sénior, un estudio de campo realizado por los expertos de ICEA en colaboración con Fundación Mutualidad, explora hacia dónde se debe transformar la oferta aseguradora para impactar en un colectivo en plena transformación socioeconómica y crecimiento, como el de los ciudadanos de 55 años o más.
Las preocupaciones del colectivo sénior, por tramos de edad
En esta quinta y última entrega del análisis de este ambicioso estudio presentado en 2023, empezamos por abordar si hay sintonía o desencuentro entre las preocupaciones manifestadas por el colectivo sénior en el estudio de campo realizado, y la percepción del sector seguro.
De 55 a 64 años
Las enfermedades y/o problemas relacionados con la salud, pérdida del empleo y el futuro de los hijos son los puntos de coincidencia entre las demandas del grupo de 55 a 64 años y la oferta aseguradora. Sin embargo, los potenciales clientes anteponen la salud a la previsión económica, siendo esta última la que encabeza el ranking de preocupaciones en el análisis de la entidad aseguradora. También destaca que la soledad es un tema que inquieta más de lo valorado por las compañías.
De 65 a 74 años
En este grupo de edad, hay sintonía en el nivel de preocupación en temas como los problemas de salud, afrontar una coyuntura económica desfavorable o la disminución de los ingresos como efecto de la jubilación. El punto que refleja mayor distancia en las valoraciones de una y otras parte es entrar en una fase de dependencia: mientras el sector seguro tiene puesto un gran foco, la sitúa como la segunda preocupación en su ranking, los séniors de 65 a 74 años la ubican en la séptima posición.
De 75 a 84 años
La enfermedad y los problemas de salud ocupan en ambas clasificaciones la preocupación número uno. Las divergencias vuelven a aparecer en la valoración de la independencia (segunda posición para las aseguradoras frente a la quinta de los consultados entre 75 y 84 años) o el fallecimiento (tercera posición en el ranking de las aseguradoras frente a la octava del colectivo). Sin embargo, el futuro de los hijos preocupa más a estos séniors de lo esperado por el sector seguro.
De 85 años y más
Al analizar el grupo sénior más veterano, la coincidencia es mayor: enfermedades y problemas de salud como primera preocupación y fallecimiento como segunda. Le siguen la soledad y no ser independiente y, una vez más, el sector seguro no muestra en su verdadero nivel de preocupación el futuro de sus hijos.
La demanda y la oferta sénior del sector seguros
Nueve de cada diez personas de 55 años o más tienen contratado un seguro de vivienda, sin embargo, tan solo el 8,5% del sector ofrece un seguro adaptado a esta franja de edad. En el caso del seguro de automóvil, el segundo más contratado en esta franja de edad, más de ocho de cada diez séniors firmó una póliza, pero ninguna compañía ofrece un servicio diferencial.
Otros seguros, como el de vida o fallecimiento o el de salud, ofrecen una mayor adaptación a las demandas específicas del sénior, como se aprecia en la siguiente ilustración que analiza uno a uno los diferentes sectores.
El estudio de Fundación Mutualidad analiza a partir de aquí las razones para la no contratación de un seguro en los principales ramos, ofreciendo una información de gran valor hasta ahora desconocida por el sector.
Seguro salud
- Qué opina el sector seguro. Las entidades aseguradoras creen que la principal razón para la no contratación es económica en el grupo de 55 a 74 años. La explicación para los de 75 y más, es más obvia: “Negación del aseguramiento por incumplimiento de requisitos”, en aspectos como edad o patologías previas.
- Qué opinan los sé La existencia de una sanidad pública es para el colectivo la primera razón para no contratar un seguro de salud. Pese a que son muchos los que consideran que este servicio cubre sus necesidades, la falta de recursos económicos es para los grupos de 55 a 84 años la segunda razón para no contratarlo.
Seguro vida ahorro y planes de pensiones
- Qué opina el sector seguro. El desconocimiento de este tipo de productos, es para las compañías la principal razón para no contratarlo. La desconfianza ocupa la segunda posición, menos para el grupo de 85 y más años, al que se achaca falta de recursos económicos como razón para desistir en su contratación.
- Qué opinan los sé En el ramo de vida ahorro y planes de pensiones, el estudio constata un desencuentro importante. Las razones arriba esgrimidas para su no contratación son en las encuestas poco relevantes, al menos mucho menos que la falta de recursos económicos, la falta de amplitud y adaptabilidad de las coberturas o de la previsión para la jubilación. El colectivo valora como positivas la suficiencia de la pensión pública y los ahorros para hacer frente a los imprevistos que puedan llegar.
Seguro vida riesgo
- Qué opina el sector seguro. Para el grupo de edad de 55 a 64 años, se esgrime la falta de recursos económicos como primera barrera para la contratación de este seguro. En segundo lugar, se apunta para este tramo la falta de amplitud y adaptabilidad de las coberturas del seguro. Para el sector seguro, es el incumplimiento de requisitos (por edad u otros) la primera razón de la no contratación de vida riesgo entre las personas de 65 años y más.
- Qué opinan los séniors. Aunque en diferente posición de importancia, coincide en el tramo de edad de 55 a 64 años las barreras para la contratación de este seguro. Aquí el desencuentro se da en el grupo de mayores de 64 años, para los que son las razones económicas y la falta de amplitud y adaptabilidad del seguro las principales objeciones a la contratación.
Seguro hogar
- Qué opina el sector seguro. Considera la desconfianza como la principal razón para que los ciudadanos de 55 a 74 años no contraten este seguro. Para los potenciales clientes de más edad, son las razones económicas y la falta de amplitud y adaptabilidad las razones.
- Qué opinan los séniors. Las encuestas muestran casi total coincidencia con el razonamiento esgrimido por las compañías.
Servicios demandados y ofertados al colectivo sénior
¿Cómo conciliar oferta y demanda? El estudio aporta aquí uno de sus puntos de mayor valor al indicar que son las sesiones de rehabilitación y/o enfermería y la ayuda a domicilio dos de las demandas más apreciadas por el cliente sénior. En ambos casos, se trata de dos demandas bien monitorizadas por el sector.
Lo que no siempre ocurre. Es el caso de intereses muy generalizados poco escuchados por el sector. Dos ejemplos son la solución integral para adaptar el domicilio y eliminar barreras físicas y la reparación/ajustes de dispositivos ópticos, audífonos y ortopedia.
El siguiente cuadro resume algunas de las medidas que las entidades aseguradoras pueden tomar para adaptar su catálogo de coberturas a las demandas del sénior.
Nota: 1 indica el más valorado por los séniors o más presente en la oferta aseguradora y 14 el menos valorado por los séniors o menos presente en la oferta de las compañías.
Trato diferencial al colectivo sénior
En este capítulo final, se fotografía la situación actual para la adaptación del trato al cliente sénior por parte del sector. Y las principales conclusiones son:
- El 56,5% de las empresas del sector no ofrecen un servicio especial y/o diferencial al colectivo sénior. El 43,5% sí lo hace.
- Solo el 10,9% ofrece documentación adaptada, frente al 70% de personas de 55 años o más que manifiesta problemas para leer y entender la documentación entregada.
- Solo tres de cada diez entidades cuentan con personal especializado para atender al colectivo. Más de 7,2 de cada diez clientes aseguran no haber recibido por parte de su entidad “ningún tipo de asesoramiento” y, seis de cada diez, no sienten recibir “trato diferencial”. Si bien en este último punto es importante destacar que ocho de cada diez séniors que sí recibieron trato diferencial, no se encuentran “cómodos” con esta atención.
Límites a la contratación por motivos de edad
El informe concluye con un tema espinoso: los límites a la contratación de un seguro motivados por la edad.
- El 89,1% de las entidades establecen limitaciones relacionadas con la edad a la hora de contratar sus productos.
- Los seguros en los que más se rechaza el aseguramiento por edad son: salud (42,6%), los de vida y fallecimiento (23,4%), accidente (12,8%) y decesos (10,6%).
- Frente a esta situación, solo el 10,9% de los encuestados declaró que se les había negado alguna contratación por motivos de edad.